Creado en 1972, aunque no inaugurado oficialmente hasta 1979, el Museo de Escultura al Aire Libre de la Castellana es un proyecto del artista Eusebio Sampere en un intento de acercar el arte moderno al ciudadano. Situado bajo el paso elevado que une sobre El paseo de la Castellana las calles de Eduardo Dato y Juan Bravo. Alberga 17 esculturas abstractas de importantes artistas españoles, destacando la Sirena Varada o Lugar de encuentros III de Eduardo Chillida una obra que en su momento fue retirada por el alcalde Carlos Arias Navarro en 1973 aduciendo razones de seguridad, siendo restituida en 1978. La mayoría de las obras se encuentran ubicadas bajo el tablero de el puente y luego van exponiéndose en tres sucesivas terrazas hasta llegar al nivel de la Castellana donde se halla la obra de Chillida. Las esculturas son donaciones de los propios autores, en muchos casos amigos de Eusebio Sempere.
OBRAS EXPUESTAS
Sin título (triptico) (1972) de Manuel Rivera (1927-1995)
Acero inoxidable. Realizada en acero inoxidable, pertenece a la serie Los espejos. Es una obra característica de Rivera, en las que la superposición de telas metálicas de distinta trama crea efectos ópticos al desplazar la mirada sobre ellas.

Un mon per a infants (1971) de Andreu Alfaro (1929-2012)
Un mundo para niños, consta de 16 barras de acero inoxidable de 2 metros de largo cada una atravesadas por su eje formando un abanico que gira 180º entre la primera y la última. La primera y la última sujetan la estructura al pedestal produciendo una sensación de movimiento como de un molinillo de viento. Un tema infantil que Alfaro recupera de un libro de relatos para niños recopilado por Joan Foster en los años 50 con el mismo título que la obra expuesta y que el mismo Alfaro ilustró entonces.


Mediterránea (1972) de Martin Chirino (1925-2019)
El autor quiere con esta obra realizada con laminas de acero pintadas en rojo evocar el mar y la luz propia del Mediterráneo y para ello se ha ubicado en el estanque situado en la zona superior.


Estructura permutacional (1972) de Francisco Sobrino Ochoa (1932-2014)
Acero inoxidable. Otra obra del museo que juega con las matemáticas y la óptica. En esta ocasión la composición está formada por placas metálicas de 50 cm que se ensamblan unas con otras en vertical y perpendiculares, forman cubos cuyas caras no llegan a cerrarse del todo. Estos módulos crean figuras romboidales combinados a través de un eje central. El hecho de que un mismo lado pueda tomarse como base y también como pieza superior crea un fenómeno que se conoce como "perspectiva reversible"

Al otro lado del muro (1972) de Josep María Subirachs (1927-2014)
Subirachs, escultor de la Fachada de la Pasión de La Sagrada Familia en Barcelona, con esta escultura representa un monolito de hormigón atravesado por seis esferas de piedra caliza. Con ambos elementos el artista realiza un juego de contrastes tanto en las formas como en los materiales. Al mismo tiempo el autor pretende buscar el equilibrio y la simetría simbolizado por las propias figuras esféricas. En origen las bolas eran de aluminio, pero fueron sustituidas al poco tiempo por otras mas resistentes, a causa de las agresiones que sufrió la pieza.
Estructuración hiperpoliédrica del espacio (1971) de Rafael Leoz (1921-1976)
En este caso estamos ante la obra de un arquitecto y en la realización práctica de uno de sus sistemas de división del espacio utilizando cuerpos geométricos que se disponen unos dentro de otros a la manera de las muñecas rusas.En palabras del propio autor se trata de una "representación volumétrica. simbólica y compendiada" del cubo. Realizada en acero inoxidable pieza está compuesta por un cubo que alberga en su interior un poliedro de Kelvin, formado por seis cuadrados y ocho hexágonos que a su vez tiene en su interior un octaedro regular y esta secuencia se repite otras dos veces.
Móvil (1972) de Eusebio Sempere (1923-1985)
Acero inoxidable. Son dos estructuras cuadradas de acero suspendidas verticalmente a 20 cm de distancia una de otra. Cada una está compuesta de unas varillas con distinto diseño que al ser movidas crean un interesante efecto óptico.
Proyecto para un monumento IV B (1972) de Pablo Palazuelo (1915-2007)
Realizada en acero corten se trata de una composición que busca en palabras del autor "el dinamismo de lo aparentemente estático". La plancha de acero esta plegada y recortada de tal manera que asemeja un trabajo de papiroflexia por la sensación de ligereza que asemeja a pesar del pesado material utilizado.
Estela de Venus (1973) de Amadeo Gabino (1922-2004)
Realizada en acero inoxidable con remaches de hierro, la obra es una especie de tótem. Gabino experimenta con materiales industriales, creando piezas que resaltan las tendencias tecnológicas y funcionales. La obra expuesta aquí es similar a otra que se encuentra en otro museo de escultura al aire libre, el de Alcalá de Henares.

Proalí (1984) de Marcel Martí (1925-2010)
Se trata de una réplica en bronce de la original en mármol blanco que se halla en el Museo Municipal de Madrid. Una obra de formas curvas, onduladas y asimétricas. Mediante esta figura el autor simboliza a modo de tótem un mundo primitivo, mágico e intemporal.


Mère Ubú (1975) de Joan Miró (1893-1983) Esta escultura de bronce que representa a una especie de mujer-pájaro es representativa del lenguaje expresionista de Miró en su última época esta basada en la obra Ubú rey de Alfred Jarry .Su instalación tuvo que esperar al año 1978 para ser instalada pues el autor se negaba a donar cualquier obra al museo hasta que no ser resolviera el problema con La Sirena Varada de Chillida.
Volumen-Relieve-Arquitectura (1973) de Gerardo Rueda (1926-1996)
Situado en la segunda terraza del Museo, este gran mural de 10 metros de longitud realizado en granito, Gerardo Rueda plantea una ordenación de la superficie utilizando los mismos elementos arquitectónicos y materiales utilizados en el Museo basándose en el cubismo y el constructivismo. El escultor aplica al limite la simplificación y estructuración del espacio eliminando cualquier elemento decorativo superfluo.
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Volumen-Relieve-Arquitectura de Gerardo Rueda. Autor de la Fotografía Edescas. Fuente Wikipedia. Licencia Creative Commons |
Toros ibéricos (1958-1960) de Alberto Sánchez (1895-1962)
Es una ampliación en bronce a partir del original propiedad de la familia y que fue realizada en Rusia entre 1958 y 1960. Es una composición vertical de superficies curvas que refleja la añoranza por la tierra que dejó tras la Guerra Civil y se inspira en las esculturas ibéricas que pudo contemplar en el Museo Arqueológico Nacional durante su juventud.


La Sirena varada (1972) de Eduardo Chillida (1924-2002)
Realizada en hormigón armado es llamada también
Lugar de encuentros III, fue la primera obra realizada en hormigón armado por Chillida y fue creada expresamente para ocupar el lugar central del museo. En ella
juega con la gravedad haciendo levitar esta gran estructura de hormigón blanco. La combinación de formas rectas y curvas confieren al conjunto una sensación de movimiento.

La petite faucile (1937) de Julio González (1876-1942)
"La pequeña hoz" fue realizada en plena Guerra Civil y también es conocida por el título "Homenaje a la hoz y el martillo" y pone en contexto la postura política adoptada por el artista. Realizada en bronce a partir de una obra anterior. Fue donada por la hija de Julio González.

Unidades-Yunta (1972) de Pablo Serrano (1908-1985)
Esta obra, la única del museo situada al otro lado del paseo de la Castellana, se trata de una escultura conceptual que se compone de dos piezas de formas que pudieran llegar a acoplarse en una unión perfecta. El interior de bronce dorado y pulimentado que contrasta con el exterior rugoso y sombrío. La serie Unidades-Yunta de la que forma parte esta escultura representa la fusión de las fuerzas opuestas que configuran el mundo: la vida y la muerte, lo masculino y lo femenino, lo material y lo espiritual, etc.
Plaza-Escultura (1972) de Gustavo Torner (1925)
Esta obra se encuentra apartada de las demás, en una pequeña terraza-mirador a nivel del paso superior en la calle Serrano por lo que puede llegar a pasar desapercibida por los visitantes del museo. Fue concebida como una especie de fuente donde el agua se deslizaría por la plataforma en granito de Brasil sobre la que se asientan cuatro elementos geométricos que "aluden a una esfera que no existe" El color rojizo del cobre empleado se reflejaría en la lámina de agua y al mismo tiempo crearía un fuerte contraste con los colores negros y marrones de la plataforma, pero el oscurecimiento del metal, añadido a la perdida de la función como fuente han arruinado la primeriza intención del autor.
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Plaza-escultura de Gustavo Torner. Autor de la Fotografía Edescas. Fuente Wikipedia. Licencia Creative Commons
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El Museo de Escultura al Aire Libre se encuentra en el Paseo de la Castellana, 40
https://www.madrid.es/portales/munimadrid/es/UnidadWeb/Museo-de-Escultura-al-Aire-Libre-de-La-Castellana/
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